Fíjate bien, estás junto a una edificación única, tanto en su estructura como en su antiguo uso. Se trata del secadero de tabaco, una joya patrimonial de Granadilla de Abona.
Este edificio, con su inconfundible estructura rectangular que aloja dos naves paralelas de techos a dos aguas, es verdaderamente único en el municipio de Granadilla y en toda la comarca de Abona. Se encuentra cerca del antiguo Camino Real de Sur, en un tramo que conecta la capital del municipio con Arico. La construcción de este peculiar edificio se remonta a 1878 y se atribuye a José García Torres, un agricultor apasionado por el cultivo del tabaco.
Durante el siglo XIX, la producción de tabaco se convirtió en una actividad importante en la comarca. Por esta razón, este edificio se levantó en esta zona de la isla.
Aunque hubo estructuras similares, este es el mejor conservado y hoy ostenta el título de Bien de Interés Cultural, clasificado como Sitio Etnológico.
A lo largo de los siglos, las islas Canarias han sido testigo del cultivo de diversas especies vegetales, incluyendo caña de azúcar, viñedos, tuneras para la obtención de la cochinilla, tomates, tabaco, plátanos y otras más. Los productos de estas tierras han sido exportados a todos los rincones del mundo, a través de rutas comerciales que han servido como motores del desarrollo económico. Tenerife y, en particular, esta región de la isla, han desempeñado un papel fundamental en esta rica historia de intercambio y crecimiento.
645 - 653 mts.
Calle peatonal con acera.
0.3 Km.
Baja
5'