Ya huele a cereal tostado, seguro que te llega el olor a gofio.
Nos encontramos junto a uno de los mayores y más veteranos molinos del sur de la isla de Tenerife. En él se combina la tradición con la tecnología. Y es que hoy en día, la elaboración del gofio aún comienza con la minuciosa limpieza de los granos. Los más utilizados son el trigo, el millo (maíz), la avena o la cebada. Luego viene el tueste y después la molienda, que transforma los granos en una harina que se almacena cuidadosamente antes de ser envasada y conservada.
Ya huele a cereal tostado, seguro que te llega el olor a gofio.
Nos encontramos junto a uno de los mayores y más veteranos molinos del sur de la isla de Tenerife. En él se combina la tradición con la tecnología. Y es que hoy en día, la elaboración del gofio aún comienza con la minuciosa limpieza de los granos. Los más utilizados son el trigo, el millo (maíz), la avena o la cebada. Luego viene el tueste y después la molienda, que transforma los granos en una harina que se almacena cuidadosamente antes de ser envasada y conservada.
El resultado es un alimento altamente nutritivo con un poder alimenticio excepcional. Durante siglos, el gofio ha sido el producto estrella de la gastronomía canaria, y se puede disfrutar de muchas maneras: con leche, en potajes, como base para postres como helados y mousses, y más.
A pesar de su larga historia, esta instalación produce en promedio unos 500 kg de gofio al día, y ha sabido combinar las tradiciones centenarias con tecnología moderna. Mientras exploras este lugar, quizás notes el aroma distintivo del cereal tostado y escuches el sonido del proceso de molienda con las piedras tradicionales. Adéntrate y descubre cómo se mantiene viva una de las costumbres más arraigadas en Canarias.
Repón fuerzas que seguimos nuestra ruta. Aún no hemos terminado.
860 - 670 mts.
Calle + Camino real.
0.4 Km.
Baja
15'