Durante milenios, hasta la llegada de las nuevas tecnologías, los navegantes de todos los lugares del mundo han observado el cielo para guiarse en los océanos del planeta, dependían de los astros para poder navegar en la magnitud de los mares. Podríamos decir que eran su “GPS”.
La expedición de Magallanes-Elcano hizo escala en 1519 frente a estas costas de Granadilla de Abona. ¿Cómo se podían orientar cada día de los tres años que duró su ruta logrando dar la vuelta al mundo por primera vez en la historia? Resultó muy sencillo, aunque nos parezca complicado. Formaban parte de la tripulación marinos con excelentes dotes para la guía en alta mar gracias a las estrellas.
Utilizaban herramientas que hoy nos resultan casi desconocidas y menos aún sabríamos usarlas: cronómetros, astrolabios, nocturlabios, cuadrantes, sextantes, tablas astronómicas, … Gracias a estos instrumentos estos valientes pudieron atravesar el Pacífico, que, hasta ese momento, era un océano desconocido para los marinos europeos, y regresar a España navegando siempre hacia el oeste.
Tres siglos más tarde, en la Montaña de Guajara (2.718 m), cima más alta de Granadilla de Abona, ocurrió algo realmente interesante. Un científico escocés llamado Charles Piazzi Smyth eligió este lugar para mirar las estrellas sin que las nubes se interpusieran en su vista. Todo aquel que llegue a esta cumbre aún puede ver algunos restos de la modesta estación que él y su esposa Jessica Duncan usaron allá por el año 1856, cuando decidieron pasar su luna de miel en Tenerife y aprovecharon para estudiar el cielo en la que hasta ese momento fue la primera estación astronómica de montaña de la historia.
Hoy en día, el Instituto de Astrofísica de Canarias tiene una de sus sedes en la cima de Izaña, también aquí en Tenerife.
Se trata de un paso más en la astronomía. Tiempos modernos con enormes telescopios que pueden ver estrellas a distancias increíbles.
Desde este lugar en el que te encuentras, junto a la playa de El Cabezo, con un simple giro de cuello, puedes ver tanto el mar como las montañas. Cada noche, el cielo se llena de estrellas. La astronomía ha estado y está al servicio de la ciencia, y los astros nos tienen mucho que contar, solo necesitas mirarlos para escuchar su historia.
Sigamos nuestra ruta caminando por el litoral de El Médano, aún tenemos más cosas que contarte.
(0) Ida. Regreso por la costa o por la misma ruta
3 mts.
Acera + paseo costero.
0,5 Km.
Baja
10'